OBITUARIO

A JOSÉ LUIS BERNAL VERDUGO

Hoy el Señor de las Penas ha reclamado a su vera a una buena persona que amó y sirvió a nuestra Hermandad con la sencillez de los grandes. Porque sólo los grandes son capaces de dejar profundas huellas de amor y ejemplo de señorío en este mundo nuestro que se desliza por tantas banalidades inservibles y carentes de valor ante Dios. 

Tu Virgen del Desconsuelo, querido José Luis, ya te ha abierto las puertas del cielo donde te esperan impacientes esos ojos de tu esposa,  azules como él, que tanto echabas de menos.

El señor te tiene preparado un rinconcito allá arriba para que brindemos contigo los que aquí nos quedamos con esa copita de vino que solo comparten los buenos amigos. 

¡Descansa en paz hermano mío!

Paco Zurita 

Hermano mayor

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